Originario de Vigo y orgulloso de su tierra gallega, Diego Torrado es una cara conocida en el circuito de regatas profesionales, habiendo participado en varias Ocean Race, así como en la construcción de muchos yates de regata de alto perfil y como capitán de barco en varias competiciones de TP52, GP42 y RC44.
A pesar de haber estudiado ingeniería agrónoma, su gran pasión por la vela le ha llevado a abrirse camino a nivel profesional en el mundo de la náutica desde pequeño. Un gran ejemplo de que con trabajo, determinación y pasión, se puede conseguir lo que nos propongamos.
En Marina Coruña hemos estado con él mientras trabajaba junto al equipo Viva México, antes de partir para The Ocean Race Europe. ¡Os lo contamos!
“The Ocean Race: la importancia del factor humano”
Diego Torrado tenía 8 años cuando empezó a navegar en un curso de verano en Vigo, en Galicia. Lo que no sabía por aquel entonces era que lo que comenzó como una simple actividad “extraescolar”, pronto se convertiría en su profesión y forma de vida.
Y es que su ambición y ganas de ir más allá, coincidieron con la época dorada de la vela española, a finales de los años 90, cuando muchos equipos españoles se empezaron a profesionalizar y dar el salto a nivel internacional, donde también existía un auge.
“La evolución te la vas encontrando, como todo en la vida. A medida que vas haciendo con trabajo y ganas, las cosas te van surgiendo. Cuando tenía 18 años, la vela española estaba en un momento espectacular y me hice hueco en el mundo profesional poco a poco. Yo estudiaba ingeniería agrónoma por aquel entonces, pero siempre seguí navegando, fui saltando de un equipo a otro y de repente me di cuenta que me estaba dedicando a lo que más me gustaba de forma profesional”.
Siempre ha sido navegante y en sus comienzos, el mismo navegante era también el encargado de gestionar el barco. Pero con el paso de los años y a medida que se fue profesionalizando, su papel de “shore manager” y “boat captain” se hizo protagonista.
“El mundo de la vela se ha ido profesionalizando a tal nivel, con más medios, más regatas, más entrenos, materiales, velas, más gestión…que al final se necesita a gente que se dedique exclusivamente a la gestión”.
Diego ya participó en varias Ocean Race, como capitán de barco con Abu Dhabi Ocean Racing, que se llevó la victoria en la edición 2014-2015, y como “shore manager” con Vestas 11th Hours Racing en 2017-2018.
A pesar de que sigue navegando regatas y estando en activo lo máximo que puede, su trabajo actualmente exige menos navegación y más gestión y control del barco.
“Para mi, lo mejor de mi trabajo es prácticamente todo. El estar continuamente con el barco e intentar tenerlo siempre a punto, conocer cada detalle técnico, mecánico…es algo que disfruto realmente”.
“Cuando el equipo se va a navegar, yo me quedo en tierra. Al principio es duro, pero te acostumbras y también asumes la importancia de tu trabajo. En un equipo, somos todos piezas clave. Todo tiene que ir engrasado, porque si falla uno, fallan todos”.
Y es que el trabajo en equipo es uno de los principales valores que transmite este deporte. Al fin y al cabo, cuando trabajas con un grupo de gente en condiciones extremas y muy duras, la clave es confiar en la gente que está a tu alrededor y aprender a ser compañero.
El factor humano es fundamental y para tener un buen equipo, es importante tener una buena dirección. Al fin y al cabo es un trabajo que tiene que ser piramidal, tiene que existir una buena base con alguien que dirija y que el resto confíe en ese mando. A partir de ahí, el resto se consigue con el trabajo constante.
“Tenemos una mina de oro, pero no la estamos explotando”
Con toda su trayectoria en el mundo de la vela, Diego es consciente de que en España existe un enorme potencial para el deporte náutico que todavía está sin explotar. De nuestras aguas ya han salido varios campeones pero a nivel infraestructura y apoyos, todavía falta un empujón para que nos situemos en la línea con otros países como Francia, Inglaterra o Italia.
“Tenemos una calidad impresionante en España. Las condiciones del mar, la costa, la gente, la calidad de vida…Pero nos tendríamos que hacer ver un poco más y luchar por salir ahí fuera. El turismo náutico tiene un potencial increíble pero no lo estamos explotando al nivel que se merece”.
“En Galicia también hay mucho que mejorar, pero el problema sigue siendo la falta de inversión publicitaria. Diría que tenemos una de las mejores costas del mundo para navegar, para cruceros…Las rías son espectaculares y los puertos marinos son increíbles y modernos.
Además, Galicia es un sitio clave de paso entre el Mediterráneo y Europa del norte, por donde pasan los grandes navegantes. Tenemos una oportunidad increíble, una mina de oro, pero no la estamos explotando. En ese sentido sí que vivimos de espaldas al mar”.
Y es que, después de dar la vuelta al mundo y haber conocido el mundo de la náutica en otros países de primera mano, el vigués Diego Torrado no duda de que las rías gallegas y nuestras marinas son de lo mejor que se ha encontrado.
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